segunda-feira, 8 de agosto de 2011

Noticias de brasil en argentina!

Otro caso de corrupción salpica a Dilma Rousseff
Un ministro nombró a gente de su partido en una empresa pública.
EN PROBLEMAS EL MINISTRO DE AGRICULTURA, WAGNER ROSSI.







Para Brasil, su plan no es proteccionista
El ministro de Desarrollo, Fernando Pimentel, dijo que el gobierno de Dilma Rousseff quiere relaciones comerciales saludables.
FERNANDO PIMENTEL








Enojo por la compra de carne de cerdo a Brasil
Primero llegó el plan Pescado para todos, luego el Milanesa para todos, después vino Leche para todos, Carne para todos y el Cerdo para todos. Y este último parece ser la gota que rebalsó el vaso de los productores.
COMPRA CRISTINA FERNANDEZ EN EL LANZAMIENTO DE CARNE PARA TODOS. Argentina produce anualmente 2 millones de kilos de carne de cerdo, con un consumo per cápita de 8 kilos por año.




Otro caso de corrupción salpica a Dilma Rousseff
El ministro brasileño de Agricultura, Wagner Rossi, aumentó, supuestamente, el número de asesores de una empresa pública dependiente de esa cartera cuando estaba al frente del organismo y los puestos fueron ocupados por familiares de miembros de su partido, aseguró ayer el diario Folha de SÆo Paulo.
De acuerdo con el periódico, que no especifica sus fuentes, el número de asesores de la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), dependiente del Ministerio de Agricultura, pasó de 6 a 26 cargos cuando ese órgano estaba bajo la dirección de Rossi, entre 2007 y 2010.
Muchos de los nombramientos fueron ocupados después de que Rossi, perteneciente al Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB, aliado del Gobierno), fuera designado ministro de Agricultura por el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, en marzo de 2009.
Además, el organismo definió 21 nuevos nombramientos durante la actual legislatura, en la que Rossi fue confirmado en el cargo por la actual presidenta, Dilma Rousseff, agregó Folha de SÆo Paulo, que precisó que algunas de las contrataciones llevan la firma del ministro.
Entre los nuevos asesores de Conab se encuentran Rodrigo Rodrigues Calheiros, hijo del senador del PMDB Renan Calheiros (quien entró en el organismo el pasado 14 de abril), y Adriano Quércia Soares, sobrino del fallecido exgobernador del estado de SÆo Paulo Orestes Quércia.
Según el diario, Adriano Quércia había trabajado con Baleia Rossi, hijo del ministro, antes de recalar en la Conab. En calidad de asesora de dirección, el pasado 14 de julio asumió M“nica Infante de Azambuja, exesposa del líder del PMDB en la Cámara de Diputados Henrique Eduardo Alves. La semana pasada el exdirector financiero de Conab Oscar Jucá calificó el organismo estatal de reducto de bandidos.

Para Brasil, su plan no es proteccionista
Aunque Brasil se encuentra preocupado por la pérdida de competitividad de sus exportaciones industriales, por lo que lanzó un plan estímulo para la industria; el ministro brasileño de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimentel, descartó ayer que el paquete de medidas tenga un carácter proteccionista. Además, aseguró que su país quiere relaciones comerciales saludables, al tiempo que advirtió que el gobierno de Dilma Rousseff respetará los acuerdos internacionales.
El gigante sudamericano lanzó el martes pasado un plan de incentivos fiscales por unos 16.000 millones de dólares (US$) para apuntalar y proteger su alicaída industria. “Es necesario proteger nuestra economía, nuestras fuerzas productivas, nuestros empleos. La industria nacional tiene en mí una aliada”, afirmó la jefa de Estado, al presentar la iniciativa bautizada “Brasil más grande”.
“No vamos a cerrar el país, no vamos a prohibir importar nada, no vamos a romper ningún acuerdo internacional”, aclaró Pimentel en una rueda de prensa en San Pablo.
El funcionario aseguró que el plan anunciado, que prevé exenciones fiscales por valor de unos US$ 16.025 millones para el sector industrial, llega en un “momento de emergencia” en el que los socios comerciales de las manufacturas brasileñas se encuentran estancados por la crisis.
Pimentel aseguró que el gobierno de Rousseff hará “todo lo posible” para incentivar la industria brasileña sin vulnerar las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y dijo que Brasil tendrá “una relación comercial saludable” con el resto de los países.
En su opinión, la crisis financiera internacional sumada a la ascensión de China y el conjunto del bloque asiático propició una situación de cambio en el paradigma industrial y el lanzamiento de las nuevas políticas de incentivo tienen por objetivo combatir ese escenario.
Además de exenciones fiscales, el plan contempla líneas de crédito a exportadores y permite al Gobierno brasileño hacer compras preferenciales en empresas que inviertan en innovación.
Esta medida se aplicará, de acuerdo con el ministro, “con una visión muy rigurosa”.

Enojo por la compra de carne de cerdo a Brasil
El reclamo de los productores de cerdo es que la carne que se vende proviene de sus competidores de Brasil y que, además, ingresan con precios más bajos que los que se manejan en el mercado nacional. Pero desde la cartera de Agricultura hacen oídos sordos a esta situación. Tal es así que se anunció que el titular de ese ministerio, Julián Domínguez, viajará esta semana a Brasil para analizar las condiciones de ingreso de carne de cerdo del país vecino.
La cartera agraria indicó que el encuentro con el ministro brasileño Wagner Rossi se llevará a cabo en San Pablo, donde ambos funcionarios abordarán los acuerdos bilaterales, entre los que sobresale la situación de la carne de cerdo y la incidencia del comercio a nivel regional y de terceros mercados.
Productores porcinos realizaron, en las últimas semanas, medidas de fuerza para reclamar contra la importación de carne de cerdo proveniente de Brasil.
En ese marco, se efectuó hace dos semanas una protesta en los puentes del Mercosur en reclamo del establecimiento de cupos al ingreso de cerdos brasileños.
En esa oportunidad, el titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, calificó de crítica la situación que atraviesan los productores porcinos por el ingreso de pulpa importada al país, y también fustigó el plan Cerdo para todos, anunciado por el Gobierno nacional.
El dirigente denunció la existencia de lo que denominó irónicamente un “chanchoducto”, en referencia al ingreso casi automático de porcinos procedentes del Brasil.
“El chanchoducto brasileño ha estado abierto todo este tiempo, jodiendo a los trabajadores y productores de chacinados, mientras tanto los consumidores siguen pagando precios exorbitantes por esos productos”, sostuvo.
Brasil tiene una producción de 69 millones de cabezas de cerdos y un consumo de 30 kilos anuales por habitante, en tanto en la Argentina la producción se redujo a apenas 2 millones, con un consumo per cápita de 8 kilos por año.
“En diciembre de 2010 le planteamos a Domínguez que era necesario actuar para que fueran los pequeños y medianos productores quienes hicieran los chanchos, en un momento en el que el precio de los animales era bueno y la carne de vaca, cara. Pensamos que lo había entendido. Pero no fue así”, lamentó Buzzi.
Así, remarcó que “todo lo que se consume de jamones está hecho con cerdo de Brasil”, y afirmó que “están importando pulpas y tocinos congelados a precios de dumping”.
“Brasil está subsidiando a sus productores, y los industriales compran esa mercadería porque logran más rentabilidad. Esto es una primera avanzada de alimentos importados, algo parecido a lo que pasaba a mitad de los 90”, alertó.

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