Brasil dijo que Argentina está desmantelando el Mercosur

Para el diario O Globo, el Gobierno atenta contra la integración del bloque.
La tensión con Brasil por las trabas a las importaciones implementadas desde la Secretaría de Comercio Interior dirigida por el polémico Guillermo Moreno sigue en aumento. El diario O Globo de Brasil publicó ayer una editorial en la que acusa al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner de “provocar una guerra comercial que destruye el espíritu de integración” del Mercosur.
La editorial de uno de los periódicos más leídos de Brasil considera “lamentable que en una época de contracción económica mundial, la Argentina se embarque en una guerra comercial con Brasil, el principal socio en el Mercosur”. El planteo aparece apenas cinco días después de la reunión entre los cancilleres de ambos países, que tuvo como objetivo la reactivación de las relaciones comerciales tras la tensión generada por la implementación de “trabas recíprocas” en el intercambio bilateral.
“Justo cuando las dos mayores economías de América del Sur deben energizarse entre sí, para compensar parcialmente la caída de la demanda externa, la Argentina contribuye a desmantelar el Mercosur, que ya no se puede llamar un bloque comercial, una vez que cayera en las garras de proteccionismo, especialmente en Argentina”, señala el matutino.
Según O Globo, Brasil viene teniendo una “paciencia china” con Argentina para salvar el bloque regional, “pero se vio obligado a responder de la misma manera”, en referencia a las restricciones que el gobierno de Dilma Rousseff impuso a algunos productos argentinos como represalia por las trabas aplicadas por la Secretaría de Moreno.
Según afirma la nota, “Brasil se las arregló para mantener, en las últimas décadas, la continuidad de una política económica responsable, capaz de inspirar confianza y, por lo tanto, atraer la inversión extranjera, independientemente del partido en el poder”, mientras que en Argentina estas decisiones estarían ligadas al gobernante de turno, generalmente “de corte peronista nacional-populista”. Al respecto, el economista Miguel Angel Broda señaló que la Argentina es ahora “un país aislado que ha acelerado su proteccionismo” y que está “profundizando su error”.

Las trabas de Brasil ya afectan a la producción argentina.
La medida perjudicó el trabajo de 700 empleados. La semana pasada también se frenó el ingreso de 300 toneladas de queso.
Cuando Guillermo Moreno impuso medidas restrictivas a las importaciones nadie dudó en que traería consecuencias. Desde hace varios meses, desde Brasil se han comenzado a tomar, paulatinamente, controles a las exportaciones argentinas. Ayer se supo que entre estas medidas se encuentran las trabas al ingreso de papas congeladas de la empresa McCain, ubicada en la provincia de Buenos Aires. La decisión llevó a la empresa a paralizar su planta en la ciudad de Balcarce, lo que obliga a que sus 700 empleados se dediquen a “otras tareas” a la espera de que Brasil permita el ingreso de camiones que permanecen en la frontera. Claudio Ribero, ejecutivo de McCain explicó que “Brasil suspendió las licencias de importación, por lo cual se nos pararon los envíos a ese país. Nos pararon unos cuantos camiones en la frontera”. La planta de McCain en Argentina, junto con la que posee la holandesa Farm Frites, proveen de papas cortadas, congeladas y preparadas para su fritura para las cadenas de hamburgueserías McDonald's, Burger King y la brasileña Bob's.
Brasil, socio de Argentina, Paraguay y Uruguay en el Mercosur, suspendió las licencias automáticas de importación para una decena de productos perecederos argentinos, entre ellos, manzanas, trigo, uvas pasas y papas. Argentina ya había suspendido en los últimos años las licencias automáticas y en febrero pasado aplicó además un sistema de control que demora las compras en el exterior dentro de una política de sustitución de importaciones. Frente a este escenario el analista Gustavo Segré advirtió: “Y no serán las últimas represalias”.
Para este analista, Brasil quiere mostrar que también puede “complicar el comercio de Argentina. La semana pasada el ingreso de quesos argentinos a Brasil quedó virtualmente paralizado con la decisión del vecino país de cancelar licencias no automáticas que habían sido aprobadas durante la semana pasada. La decisión afectó a unas 300 toneladas de queso mozzarella, valuadas en 1,2 millones de dólares. Otra respuesta directa a las trabas que aplicó en los últimos meses la Argentina al ingreso de carne de cerdo de ese país.

Los productores argentinos esperan la apertura de Brasil.
El Gobierno nacional reabrió el ingreso de carne de cerdo brasileña y la administración de Rousseff comprará pasas de uvas. El cierre a los productos argentinos en el mercado brasileño sigue ampliándose. Tal es así que el país vecino decidió aplicar licencias no automáticas a distintos tipos de quesos, vinos, frutas secas, uvas, papas, manzanas, peras y harina de trigo de origen local.
La medida obliga a los exportadores argentinos a pedir licencia previa para ingresar estos productos perecederos a suelo brasileño y puede demorar hasta dos meses. La medida había sido escuetamente anticipada el 14 de mayo pasado, en la víspera de la visita del canciller Héctor Timerman a Brasilia.
El primer coletazo de estas trabas impuestas por Brasil se sintió este lunes en la localidad bonaerense de Balcarce, cuando la productora de papas congeladas McCain debió paralizar todas sus líneas de producción a raíz de que sus cargamentos fueron frenados por las autoridades brasileñas.
Recién ayer se conoció que la Secretaría de Comercio Interior hará gestiones para reubicar la producción de esta empacadora de origen canadiense, que se comprometió a reabrir hoy.
McCain admitió ayer que podría suspender al personal.
“Si no se soluciona el conflicto, tendremos que pensar en suspensiones de personal”, reconoció el gerente de Recursos Humanos de la compañía, Claudio Rivero.
La planta está paralizada desde el domingo. En la planta de Balcarce trabajan 700 personas, que desde hace 48 horas solo realizan tareas de mantenimiento en esas instalaciones ante la paralización de la producción.
La implementación de trabas que realizó Brasil fue, por lo menos, sorpresiva.
En mayo, Timerman y el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, habían acordado con el gobierno brasileño resolver los problemas comerciales bilaterales en un plazo de 120 días.
En ese tiempo se habían comprometido a clarificar las diferencias.
Por otro lado, se supo que el Gobierno nacional restableció la importación de carne de cerdo de Brasil, producto duramente afectado por las barreras comerciales, al tiempo que el gobierno brasileño prometió restablecer las ventas de pasas de uvas.
“Está regularizada y restablecida la importación de carne de cerdo de Brasil a la Argentina”, comunicó la Cancillería argentina al ministro brasileño de Agricultura, Mendes Ribeiro.
El ministro brasileño informó a su vez que ya ha determinado liberar las importaciones de pasas de uvas de Argentina. “Este es el primer gesto argentino de regularización del comercio bilateral” tras la visita del canciller Timerman a Brasil, dijo.
El intercambio bilateral de Brasil y Argentina sumó 39.615 millones de dólares en 2011, cifra récord, con amplio superávit para Brasil de 5.803 millones.
Técnicos de ambos países se reunirán el 4 de junio en Buenos Aires para tratar de solucionar las barreras comerciales de ambos lados.
De acuerdo con datos del Ministerio de Desarrollo de Brasil, las importaciones que realiza Argentina desde Brasil cayeron 23% en abril frente al mismo período del año pasado. Esta baja se debe a los límites comerciales para el ingreso de mercaderías que el país había impuesto entre enero y marzo.
“Las nuevas medidas de control implementadas por las autoridades locales han provocado que las adquisiciones desde Brasil caigan un 23,2% en el mes. Por su parte, las exportaciones se contrajeron en un 9,7 por ciento con relación a abril de 2011, alcanzando los 1.350 millones de dólares. Este es el segundo mes del año en el que se registra una contracción de las ventas al país vecino”, evaluó un informe de la consultora económica Abeceb.com